Horacio Laurín, maquinista a cargo del Tren Patagónico que este fin de semana volvió a prestar el servicio de pasajeros entre Viedma y San Carlos de Bariloche, no ocultó su emoción al llegar en perfectas condiciones a la estación terminal de la ciudad andina y expresó que cumplir la tarea “fue una gran alegría después de estar siete meses parados”.
“Todos los compañeros esperábamos este momento, fue mucho tiempo sin andar, pero todo funcionó bien”, señaló el conductor, agregando que las vías estaban “bastante bien, sólo había un poco de yuyos pero eso no afecta”.
Comentó que esperaban con ansiedad este día porque con los compañeros de trabajo estuvieron encerrados con incertidumbre sobre si “se corría o no se corría”.
“Todos los compañeros vivimos de esto y queríamos volver a correr, y por fin pudimos hacer unos cursos, trabajar mucho en los preparativos y salir a las vías”.
Bellos paisajes y buena atención
Entre los pasajeros de este primer viaje estaba Micaela y su amiga, dos chicas mochileras de Pedro Luro, que viajaron a Viedma para tomar el Tren Patagónico a Bariloche.
Las amigas comentaron que el viaje “fue muy lindo” y destacaron la “buena atención” del personal del tren, tanto en los cuidados de seguridad e higiene frente a la pandemia, como en el servicio a bordo.
“Nunca había viajado en tren y me gustó mucho. Salió todo bien, con un protocolo muy estricto y el viaje fue buenísimo”, afirmó la joven, anticipando que también realizarán en tren el viaje de vuelta dentro de una semana.
Fuente: Prensa Gobierno de Río Negro