Ignacio Emanuel Campo Domínguez es un ciclista mendocino que realmente rompió los esquemas por su esfuerzo. Trabaja, estudia y luego practica el deporte que más le gusta, lo que le permitió en los últimos tiempos transformarse en la esperanza de la provincia en el otro lado del planeta (correrá para un importante equipo foráneo). En Sitio Andino te contamos una gran historia de superación.
A sus 16 años, Campo Domínguez se transformó en uno de los posibles cimientos en los que el cilismo de Mendoza tiene depositado todos los números. Apadrinado por el experimentado Miguel Nebot, el joven del Valle de Uco la trabaja de sol a sol junto a su humilde familia para lograr pegar el salto a los primeros planos internacionales.
En este sentido, el tupungatino contó desde hace cuanto que viene luchando por sus sueños: “Ando en bici hace 2 años y medio más o menos. Esas ganas vienen de mi papá, de mi abuelo y mi tío Miguel Nebot, quien por supuesto es mi referente en este deporte”, empezó.
Sobre las horas que le dedica a sus pasiones, el pedalista sentenció: “A veces se me complica ir a entrenar, porque entro al trabajo a las 8 de la mañana y salgo a las 3:30 de la tarde. A pesar de llegar cansado trato de ponerle todas las pilas y salir a pedalear”, señaló. Y recalcó: “Mis objetivos son irme a Europa y correr en un equipo pro tour”.
Respecto a sus laderos y lo que llevan cabo para que él cumpla con sus metas, el ciclista comentó: “Mi familia es muy importante para mí, ya que sin ellos esto no seria posible y no estaría donde estoy ahora. Ellos trabajan casi todo el día, siempre que encuentran algún trabajito lo hacen y me ayudan a que no me falte nada”, sostuvo.
Por otro lado, el mendocino hizo referencia a qué son las cosas que se le vienen en el calendario y que son vitales: “Gracias a Dios se me ha dado la oportunidad de irme a correr a Europa en el equipo Start Junior Team, la verdad es que estoy muy contento y ansioso por irme, pero lamentablemente con el tema de la pandemia está complicado viajar pero bueno, las ganas y esperanzas siguen intactas”, soltó.
Por último, un punto importante según el protagonista es que desde los órganos del Estado no recibe ningún recurso, aunque no detiene su andar por ello: “Lamentablemente la Municipalidad de Tupungato no nos ha ayudado en nada, pero estoy para el equipo de Guaymallén y ellos sí nos apoyan en el tema del transporte, del abastecimiento y demás”, cerró.
Fuente: Sitio Andino