Mango y Barreno salieron al cruce de las declaraciones del ex secretario de Trabajo al que acusaron de haber mantenido silencio cuando las políticas de Macri dejaron a cientos de trabajadores en la calle en Río Negro.
Los legisladores del Frente de Todos Marcelo Mango y Pablo Barreno manifestaron su sorpresa ante las declaraciones del legislador oficialista y ex secretario de Trabajo, Lucas Pica quien reclama al gobierno nacional que intervenga ante la incierta situación de la empresa Garbarino cuando “su propio gobierno provincial nada hizo en relación a otras empresas que dejaron a cientos de trabajadores rionegrinos en la calle”.
“¿Qué hizo Pica como secretario de Trabajo cuando la firma Interlagos cayó en quiebra por determinación judicial en 2017 y provocó la pérdida de 130 puestos de trabajos? Nada se le escuchó decir de la evasión de impuestos por cerca de 300 millones de pesos ni se expresó en referencia a la decisión de la Justicia que terminó beneficiando a los dueños, mientras los trabajadores siguen esperando respuestas”, coincidieron Mango y Barreno.
“¿Por qué Pica no se quejó ante el gobierno nacional cuando Saturno Hogar, del grupo Lucaioli cerró sus puertas en abril de 2019 dejando 500 empleados sin trabajo en la Argentina, 30 de ellos en Cipolletti, anunciando que obedecía a las dificultades económicas y financieras para afrontar el pago de salarios de los trabajadores, en un contexto de caída de la actividad económica del país?”, se preguntaron los legisladores quienes recordaron que Saturno debía 11 millones de pesos a sus trabajadores en esa época.
“Estos dos ejemplos hablan claramente de las consecuencias nefastas de las políticas neoliberales en nuestra provincia”, afirmó Mango, y agregó que “no existió desde el gobierno de Juntos Somos Río Negro una sola actuación que tendiera a la reactivación de la producción y protección de las fuentes de trabajo”.
Barreno sostuvo que “la Justicia al decretar la quiebra jugó claramente en favor de la especulación financiera y la evasión impositiva del empresariado”.
“El gobierno de la provincia podía haber tomado decisiones políticas para contener a los trabajadores y preservar las fuentes de empleo, pero prefirió seguir el camino que el macrismo marcaba en su gestión de gobierno: desocupación, fuga, evasión impositiva, para garantizar el negocio de los empresarios y la desesperación de los sectores populares”, expresaron Barreno y Mango.
“No cabe duda que Pica está en campaña, por lo que siguiendo los lineamientos de su jefe Weretilneck ataca a un gobierno nacional que reconoce derechos a los trabajadores, que lucha denodadamente para la reconstrucción del país tras el paso ruinoso de Macri y el duro golpe que significa la pandemia del Covid. Durante cuatro años de políticas neoliberales, Pica, Weretilneck y todo Juntos Somos Río Negro acompañaron con su cómplice silencio las medidas que llevaron a la Argentina a un endeudamiento descomunal y a una crisis de la que Alberto y Cristina están sacándonos, aún en contra de quienes irresponsablemente no escatiman esfuerzos para poner palos en la rueda”, concluyeron.