Milán – Cada vez más sostenible: por séptimo año consecutivo, el Giro d’Italia será ‘Ride Green’ y se confirma como el único evento ciclista de carrera por etapas de importancia mundial que tiene un bajo impacto ambiental entre sus principales prioridades.
Ride Green, el proyecto de sostenibilidad destinado a salvaguardar las zonas afectadas por la carrera mediante la recogida selectiva de residuos, se creó en 2016. Tiene como objetivo reducir los efectos del paso de la Corsa Rosa, mediante la correcta gestión de los caudales de residuos producidos por la raza, utilizando un sistema de trazabilidad.
Con la ayuda de más de 200 voluntarios y numerosas empresas locales, también coordinados por la cooperativa ERICA, los residuos producidos en las distintas localidades son recogidos en islas ecológicas especiales situadas en puntos estratégicos de cada etapa, y posteriormente enviados a reciclaje para ser devueltos a el ciclo de producción.
En este proceso, el apoyo proviene de los municipios que albergan las salidas y llegadas de las etapas de la carrera, que actúan como intermediarios para la promoción de la iniciativa, garantizando una supervisión eficaz que permita al Giro de Italia posicionarse en el escenario internacional como un evento cada vez más evento verde, capaz de difundir los principios de la sostenibilidad y sensibilizar cada vez más al público, las administraciones locales, los socios y todos los deportistas implicados.
Al final de cada edición, se premian las localidades más activas; los que han registrado los mejores resultados. En 2021 funcionaron muy bien los municipios de inicio de Lanciano (95,26%), Mileto (94,33%) y Castrovillari (93,64%), así como los de Sestriere (93,03%), Milán (90,63%) y Asti (89,89%), que destacó entre los finales de etapa.
Se recogieron más de 46.000 kilogramos de residuos, de los cuales el 85% se separó y envió a reciclaje. Es un resultado significativo, en línea con la tendencia positiva registrada en los cinco años anteriores.
La recogida selectiva de residuos, el reciclaje de materiales, la medición del rendimiento y la sensibilización del público representan así los objetivos principales del proyecto Ride Green Giro d’Italia, que en los últimos años se ha enriquecido aún más con otras iniciativas.
Además de la recogida selectiva de residuos, el proyecto verde Corsa Rosa opera en otros dos canales: la educación con BiciScuola y la movilidad sostenible con el Giro-E.
BiciScuola representa el gran programa educativo concebido hace 21 años para acercar a los jóvenes al mundo del ciclismo, al propio Giro, transmitiendo sus valores positivos relacionados con el deporte y el juego limpio. Es una iniciativa que aborda temas de actualidad, el más reciente de los cuales es la importancia de la protección del medio ambiente, con cifras récord: más de un millón y 600.000 niños involucrados hasta el momento. En 2021 se registró la participación de 200 colegios, 4.400 docentes y 60.000 niños mientras se premiaron a 1.900 alumnos (+14,3% respecto a la edición anterior).
El Giro-E es la prueba por etapas con bicicletas asistidas eléctricamente que lleva a los ciclistas aficionados por los caminos de la Corsa Rosa, los mismos días de la carrera, para vivir una experiencia profesional. Una experiencia en e-bike en la que los participantes, divididos en equipos y provistos de su propia e-bike, se someten a pruebas de regularidad realizadas en parte del recorrido de las etapas oficiales del propio Giro, que también promueve fuertemente los temas de sostenibilidad medioambiental como el uso de la bicicleta eléctrica en la vida cotidiana, un embajador del mundo eléctrico. En 2021 nació también un maillot verde inspirado en el medio ambiente.
Fuente: Prensa RCS Deporte Ciclismo – Foto: Fabio Ferrari