En el marco del período extraordinario, la Cámara de Diputados de la Nación convirtió en ley con 134 votos positivos, 107 negativos y cero abstenciones, el proyecto que establece la creación de un Plan de Pago de Deuda Previsional, con el objetivo de alcanzar una regularización de aquellas personas que no cuentan con los aportes suficientes para jubilarse.
La iniciativa permitirá que quienes ya cumplieron o estén por cumplir la edad jubilatoria y no cuenten con los 30 años de aportes correspondientes puedan acceder a la jubilación.
Como miembro informante, el diputado del Frente de Todos, Carlos Heller, aseguró que el proyecto permite “que muchísima gente, alrededor de 800.000 personas, que han quedado fuera de la posibilidad de acceder a una jubilación, puedan hacerlo”. “Esta ley es un paliativo para resolver la informalidad laboral”, aseguró, al tiempo que consideró que “es una solución virtuosa y transitoria”.
Desde el bloque de Evolución Radical, el diputado Alejandro Cacace indicó que “la realidad de fondo es un problema del mercado de trabajo”, al asegurar que “nuestro sistema jubilatorio está íntimamente vinculado al trabajo y tenemos un sistema que pide 30 años de aportes y, prácticamente, nadie puede alcanzar esa condición”.
El legislador manifestó su disidencia expresada en el dictamen de minoría, al explicar: “Nuestra propuesta es establecer una prestación proporcional de acuerdo al esfuerzo contributivo y a los aportes ingresados”.
A su turno, el diputado Nicolas del Caño (PTS – Frente de izquierda y de trabajadores – Unidad) expresó la postura de su bloque, que en la votación acompañó la iniciativa, y expresó: “Es necesario dar una medida urgente, pero esto no va a dar una respuesta en el tiempo”. “Nosotros planteamos un aumento inmediato de la jubilación mínima y que se incluya una actualización en relación a la inflación”, aseveró.
Asimismo, el diputado Alejandro Rodríguez (Identidad Bonaerense) acompañó el proyecto, pero advirtió: “Advertimos acerca de que los gobiernos tienen que hacerse cargo de no asignar derechos cuando ya se rompió el derecho básico: tener un trabajo remunerado con aportes jubilatorios”.
En tanto, el diputado José Luis Espert, de Avanza Libertad, consideró que “este proyecto no ataca el problema de la enorme heterogeneidad y descontrol de regímenes diferenciales que hay, va a fracasar en darle una jubilación digna a nuestros adultos mayores”. Espert también advirtió sobre el impacto en el déficit fiscal y la inflación de la propuesta.
En tanto, el diputado Máximo Kirchner, del Frente de Todos, celebró que “lo mejor que está pasando es que 800 mil argentinos y argentinas van a poder pelear mejor el día a día”. “Ningún jubilado origina el déficit fiscal, el Estado invierte en sus habitantes, son argentinos y argentinas que necesitan la presencia del Estado”, remarcó.
Posteriormente, también se convirtió en ley la creación del Programa Federal Único de Informatización y Digitalización de las Historias Clínicas de la República Argentina.
El proyecto tiene la finalidad de instaurar, en forma progresiva, el Sistema Único de Registro de Historias Clínicas Electrónicas, con el objetivo de garantizar que en todo el país haya una historia digital única para todas las personas, pertenezcan a la atención pública o a la privada.
La norma, que obtuvo 227 votos positivos, 2 negativos y cero abstenciones, busca establecer la obligatoriedad de que los pacientes tengan acceso libre a su historia clínica mediante un sistema digitalizado en todo el país.
Como miembro informante, el diputado Daniel Gollan, del Frente de Todos, consideró que este proyecto “tiene una importancia primordial”. “Cada vez que vamos a un centro de salud, es casi como empezar de nuevo. Desde el punto de vista de la atención, este proyecto le agrega más cohesión y mucha más eficiencia al sistema”, explicó.
La diputada Mónica Fein, del bloque Socialista, dijo que la iniciativa “promueve una visión integral de los datos de cada uno de los pacientes y su salud” y “marca una ventaja estratégica para los profesionales, sus equipos y para cada una de las personas que requieren del sistema de salud”.
Por otra parte, al comienzo de la sesión especial, la Cámara baja aceptó la renuncia del diputado Waldo Wolff (Pro), quien asumió como secretario de Asuntos Públicos del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires en diciembre. En su reemplazo, juró Gabriel Mraida (Pro).
Fuente: Prensa Cámara de Diputados de la Nación