Las esculturas y artesanías religiosas continúan siendo elementos claves en la práctica y expresión de la fe. Estas obras no solo son objetos de veneración, sino que también refuerzan la identidad cultural y comunitaria, mostrando la resiliencia y continuidad de las tradiciones espirituales en el mundo moderno.
Muchas comunidades dependen del turismo religioso y la venta de arte sacro para su sustento. Por ejemplo, en ciudades como Florencia o Jerusalén, la demanda de obras religiosas mantiene viva una tradición artesanal que se remonta a siglos atrás.
Esta labor artesanal de elaboración de esculturas religiosas, que como se ha mencionado ha trascendido en el tiempo y su elaboración es dada por las manos de virtuosos artistas, como son las del Señor Alberto Painetrú, vecino de la ciudad de San Carlos de Bariloche.
Se destaca que una de sus obras fue enviada a la autoridad máxima del Catolicismo, el Papa Franciso Bergoglio, quien la recibió personalmente de las manos del obispo Juan José Chaparro el día 7 de septiembre del año 2024 en Roma.
En atención a toda la trayectoria y compromiso de Painetrú es que el Legislador Carlos Valeri considera pertinente declarar de interés artístico y cultural la labor artesanal del Señor Alberto Painetrú de “Arte Religioso”, otorgando reconocimiento a nivel nacional e internacional tanto a su autor como a la ciudad cordillerana de San Carlos de Bariloche.
Fuente: Prensa Bloque de Legisladores Juntos Somos Río Negro