Bariloche – El profesor Ariel Pullao, docente y egresado de la Universidad Nacional de Río Negro (UNRN), junto a Franco Emmanuel Benedetto, Leonardo Neira, Maximiliano Viqueira y Facundo Smietuch de CNEA, recibieron la Mención de Honor con su proyecto titulado “Minimización e inmovilización de residuos radiactivos y/o peligrosos por plasma térmico”. Se trata de un reconocimiento en el marco del Premio al Desarrollo Innovador Orientado a la Transferencia Tecnológica realizado por el Instituto Balseiro y la Comisión Nacional de Energía Atómica.
Este premio tiene el objetivo de reconocer y fortalecer proyectos avanzados en distintas áreas tecnológicas para que puedan avanzar hacia sus diseños definitivos y/o incorporarse al mercado mediante la creación de emprendimientos comerciales. Desde este punto de vista, el proyecto premiado se encuentra en una etapa de maduración tecnológica, con un alto grado de avance, con recursos humanos especializados y resultados experimentales que muestran una prometedora resolución al problema de los residuos peligrosos/radiactivos.
El proyecto presentado por el profesor Pullao fue desarrollado en el Departamento Materiales Nucleares perteneciente a la Comisión Nacional de Energía Atómica Gerencia de Investigación Aplicada (GIA) – Gerencia de Área Investigación, Desarrollo e Innovación (GAIDI) y se centra en el diseño, construcción y puesta en marcha de pequeñas plantas modulares para tratar residuos peligrosos y/o radiactivos mediante gasificación por plasma térmico, originados en empresas privadas, centros de investigación e instituciones de gestión pública. A grandes rasgos, se propone que estas plantas estén ubicadas en los sitios de generación de residuos, o en sus cercanías, que sean de operación y control simplificados, de bajo costo de instalación y mantenimiento, así como adaptadas a la situación socioeconómica del país.
“El desarrollo de este proyecto es de vital importancia para la sociedad Argentina, ya que permitiría gestionar los residuos peligrosos y/o radiactivos de manera segura y eficiente. La tecnología propuesta es moderna, de vanguardia a nivel mundial y, en nuestro caso, con un grado de avance experimental significativo. Además, haber recibido el reconocimiento del Instituto Balseiro abre nuevas oportunidades para nuestro proyecto. Esto no sólo fortalece la labor de la Comisión Nacional de Energía Atómica en materia de residuos radiactivos, sino que también permitirá integrarse con otros sectores de la sociedad que puedan potenciar y complementar aún más la propuesta”, destaca el profesor.
Actualmente, en Argentina se generan alrededor de 18 millones de toneladas de residuos peligrosos al año y esta cifra sigue en aumento. Si bien entre 2021-2022 y 2022-2023 el porcentaje de residuos tratados disminuyó del 9.6% al 7.1%, la Organización Mundial de la Salud advierte que muchos centros de salud no tienen sistemas adecuados para manejar grandes cantidades de residuos, lo que conlleva el riesgo de que una parte de estos desechos termine en rellenos sanitarios, expuestos al contacto directo con el medio ambiente y a las personas. Por su parte, otro tipo de residuos problemáticos son los generados por la industria nuclear. Aunque Argentina genera pocos residuos radiactivos, en comparación con las grandes potencias nucleares, el volumen total de residuos radiactivos de baja actividad almacenados alcanza aproximadamente 5.3 mil m³.
Así, mediante el tratamiento propuesto en este proyecto, la parte orgánica del residuo se gasifica a alta temperatura, eliminando los compuestos tóxicos y/o patológicos, mientras que la parte inorgánica se funde en un producto sólido vítreo. Como resultado, es posible lograr una reducción del volumen del residuo entre un 60% y un 95% obteniendo, al mismo tiempo, un producto final con alta resistencia química, capaz de soportar la disolución en medios acuosos durante décadas, inmovilizando los metales pesados y/o radionucleidos en su interior, condición aceptable para su posterior almacenamiento prolongado.
Juan Ariel Pullao es egresado del Profesorado en Química y del Profesorado en Física de la UNRN. Es especialista en Aplicaciones Tecnológicas de la Energía Nuclear por el Instituto Balseiro. Es investigador en la División de Aplicaciones Médicas e Industriales del Departamento Materiales Nucleares en la Comisión Nacional de Energía Atómica Gerencia de Investigación Aplicada (GIA) – Gerencia de Área Investigación, Desarrollo e Innovación (GAIDI) y docente de Fisicoquímica de la UNRN Sede Andina. Actualmente está finalizando el Doctorado en Ciencia de los Materiales en la Universidad Nacional de Cuyo – Instituto Balseiro. En 2021 recibió el Premio INNOVAR en la categoría de Investigación por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva.
Fuente: Prensa UNRN