Los sindicatos de la educación superior de la Internacional de la Educación para América Latina nos pronunciamos enfáticamente contra el golpe de Estado y la persecución criminal desatada por los sectores que han subvertido el orden constitucional en Bolivia.
Nos solidarizamos con el pueblo boliviano, con el compañero Presidente Evo Morales Ayma, y con la dirigencia y militancia del movimiento popular, que en estas horas son víctimas de la brutal agresión ejecutada por bandas armadas al servicio de una oligarquía racista que toma revancha contra quienes se atrevieron a desafiar sus privilegios históricos para construir un Estado democrático en el cual se avanzó decididamente en la universalización de los derechos fundamentales sobre la base del reconocimiento de la pluralidad cultural de las naciones originarias, la inclusión de los movimientos sociales y de las organizaciones de la clase trabajadora.
Denunciamos, además, la operación orquestada por los grupos empresariales, los medios que instrumentalizan la comunicación para promover la manipulación ideológica de la población, y el imperialismo de los Estados Unidos que, una vez más, encuentra en la OEA una herramienta dócil para la consecución de sus objetivos. El pronunciamiento de dicho organismo ha jugado un papel decisivo y deplorable en la desestabilización del legítimo gobierno de Evo Morales, alentando con su intervención el brutal quebrantamiento de las instituciones democráticas.
Este ataque a la democracia boliviana agrede a todos los pueblos de América Latina y forma parte de la ofensiva reaccionaria contra los gobiernos democrático-populares que en este siglo han intentado construir de diversas maneras una política soberana de afirmación de la igualdad y la justicia social. Las trabajadoras y los trabajadores de la educación superior de América Latina estamos con Evo y con el pueblo de Bolivia, y reafirmamos, con nuestra solidaridad, la determinación de no cejar en la lucha por la definitiva independencia de nuestra región y la liberación de nuestros pueblos.
Fuente: Prensa CONADU