La Cabo Segundo Anabella Ojeda, integrante de la Prefectura Naval Argentina desde hace tres años, salvó la vida de un hombre de 60 años que había sufrido un paro cardíaco y no tenía signos vitales.
Anabella respondió inmediatamente al pedido de auxilio de un joven que gritaba en la calle porque Carlos, su papá, necesitaba ayuda.
Con profesionalismo y calma, le practicó maniobras de RCP y logró hacerlo reaccionar.
Además de heroína, esta zarateña es mamá de Sofía, Paula, Santiago y Ramiro, técnica en informática y enfermera de profesión. ¡Estamos orgullosos!
Fuente: Prensa Prefectura Naval Argentina