Weretilneck se reunió ayer con el Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación. Mediante financiamiento internacional se están generando acciones con beneficios para seis municipios rionegrinos, con una inversión total de 450 millones de dólares.
El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, a través de la Secretaría de Control y Monitoreo Ambiental y en conjunto con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), avanza con el segundo tramo del préstamo otorgado por esta institución financiera para la creación de centros ambientales de gestión integral de residuos sólidos urbanos (GIRSU) en el Alto Valle. La iniciativa beneficiará principalmente a las ciudades rionegrinas de Cipolletti y Allen -donde se dispondrán las obras-, Cinco Saltos, Fernández Oro, Campo Grande y Contralmirante Cordero.
En este marco, el gobernador electo de Río Negro, Alberto Weretilneck se reunió ayer con el ministro Juan Cabandié, con quien conversó sobre los avances en gestión ambiental en Río Negro y la creación de centros ambientales de gestión integral de residuos sólidos urbanos
Por otra parte, un equipo técnico del Ministerio y representantes del BID, realizaron una visita a todos los predios en los cuales se espera emplazar los centros de disposición y tratamiento y donde se sanearán los basurales a cielo abierto. A su vez, los equipos mantuvieron un encuentro junto a los intendentes de las localidades beneficiarias para presentar avances sobre los proyectos en el territorio.
El plan GIRSU que lleva adelante el Estado nacional, que desarrolla un total de 30 proyectos, contempla la construcción de centros ambientales y otras iniciativas vinculadas con el tratamiento de residuos de manera controlada. Asimismo, se trabaja en el cierre y saneamiento de basurales a cielo abierto no operativos, última etapa de la cadena de un proyecto GIRSU.
Las obras fueron incluidas en el Presupuesto Nacional 2023, a partir de gestiones del senador Weretilneck y los diputados de Juntos Somos Río Negro, Agustín Domingo y Luis Di Giacomo.
Las acciones contemplan la entrega de herramientas para la gestión de los basurales a cielo abierto en lugares sin disposición final adecuada, con el objetivo de optimizarla. El equipamiento brindado incluye maquinaria como retroexcavadoras, minicargadoras, palas frontales, tractores y carros recolectores, entre otros. También se otorgan insumos para mejorar la tarea de las y los recuperadores urbanos mediante plantas de separación, maquinarias con prensas, moledoras de vidrios y cascotes, procesadoras de neumáticos y chipeadoras, entre otras.
Para tener acceso a estas iniciativas, los municipios deben presentar pedidos de equipamiento por vías formales o proyectos GIRSU. El programa envía elementos que deben cumplir con los reglamentos operativos específicos que se generan junto con los municipios, lo que significa asumir una serie de compromisos ambientales como la mejora normativa, el buen uso del equipamiento entregado y un seguimiento de dos años.