La unidad demostrada en el Congreso Provincial Peronista celebrado en General Roca del pasado 19 de octubre, nos confirmó que “el peronismo es uno solo”, tal como expresó textualmente su presidente.
A lo largo de tres años el gobierno actual ha hablado sin decir nada más que mentiras, han sumergido al pueblo argentino en un estado de supervivencia, nos han empujado a un camino intransitable para la mayoría de los ciudadanos, pero basta! Se terminó, el peronismo construye un triunfo.
En Río Negro estamos fortaleciéndonos como oposición consistente para salirnos de ese camino. No como han hecho algunos tomando la postura fácil de ser sumisos políticos, y otros jugando a ser oposición pero con martillo de goma.
Acá el peronismo está presente. Y por mi sangre corre la tensión de la pulseada. Como deportista, siento la adrenalina cuando es inminente la largada.
Tanta ansiedad social solo puede ser el preludio de la acción. Estamos en acción. De eso pudimos dialogar en privado con Martín Soria en una prolongada e intensa reunión el 19-octubre en su despacho. Además de compartir criterios de cuestiones nacionales y provinciales, pudimos hablar temas localidad por localidad, y sobre todo de Viedma.
Como peronistas, hablamos el mismo idioma y nuestras preocupaciones rondan los mismos temas: el pueblo, el trabajo, la salud, la educación, el transporte, y otra docena de cuestiones que se vienen a pique y que afectan la calidad de vida de la gente. Si una buena administración bastara para mejorar esos aspectos, podríamos caer en el error de pensar que un buen administrador acomodaría las fichas, pero no… no es un tema administrativo, es un tema de políticas. Se necesita un liderazgo con amor al otro, que ponga la prioridad donde debe estar, con la voluntad política para administrar bien pero junto a la gente. Y con el coraje personal para no volverse sumisos, ya que las presiones están y estarán. El contexto político nunca es cómodo ni amigable.
A veces, oyendo al presidente de la Nación, a su gabinete o a sus indisimulados cómplices provinciales, me sorprendo escuchando detalles de reportes financieros, ¿ahora la política es finanzas? Nunca hablan de la gente, no hablan de soluciones, una política que no busca soluciones no debería llamarse política.
A veces creo que si esas personas que solo hablan de ajuste me acompañaran tan solo una vez en las recorridas que hacemos por los barrios, si vieran las caras de esas madres que ya no saben que poner en la olla, y la mirada destrozada del hombre que no consigue trabajo; tal vez sabrían dónde poner su esfuerzo. Pero no. Ya no me engaño. Personas que ven al vecino sufrir y le piden más sufrimiento, no son políticos. Tienen otra finalidad. Por eso creo que Viedma nos necesita para rehacer su futuro, pero sobre todo, para hacer unidos un presente digno para cada uno de sus habitantes.
Necesitamos de una Viedma con identidad y sueños, y Viedma necesita un liderazgo comprometido y trabajador.
Fuente: Mario Sabbatella Legislador por Fuerza Nacional y Popular