Comodoro Rivadavia – Se organizaron por WhatsApp y definieron los principales productos que habría que saquear y las sucursales blanco, la mayoría ubicada en la zona sur de la ciudad. El masivo intento de saqueo reunió a unas cien personas y logró ser desactivado.
Desde esta mañana vecinos de la ciudad reciben invitaciones para formar parte del grupo “Saqueos, hambre de Macri”, allí definieron los primeros supermercados a los que podrían ir con mayor cantidad de personas. Los de la zona sur fueron el blanco.
Pasadas las 15 horas un grupo de jóvenes de comenzó a congregarse dentro y fuera de la Sucursal de Carrefour en la intersección de Polonia y Lisandro de la Torre. Comunicados por teléfono, un centenar de personas comenzó a cargar en sus changos productos con el objetivo de salir en conjunto y evitar ser registrados.
El Patagónico con un trabajador en el lugar de los hechos pudo confirmar que por el intento de saqueo hay detenidos y que no alcanzaron a salir con productos desde el local. Una gran cantidad de efectivos policiales se presentaron en el estacionamiento del supermercado y evitaron desmanes.
Sobre los detenidos, se informó a este medio que son 9, de los cuales cuatro son menores de edad por lo cual permanecen en calidad de demorados a la espera de la llegada de un familiar responsable.
Organizados por Whatsapp
“Vamos por alimento”, “Vamos por todo”, “el sábado tenemos que juntarnos todos cerca para caer”, son algunos de los mensajes que aparecía en el grupo “Saqueos en Comodoro, hambre de Macri”.
Las capturas del grupo que pretendieron viralizarse fueron tomadas en las primeras horas del día como una humorada más entre todos los memes que dejó la escalada del dólar, sin embargo esta tarde todos los pronósticos se concretaron. Y se advierte por la posibilidad de que la red social contribuya a la organización de otros eventos similares en los días siguiente. Cabe señalar que otro supermercado de la zona sur aparece entre los elegidos, casualmente también cuenta con espacio destinado solo a electrodomésticos.
Fuente: El Patagónico