Hace 38 años, los argentinos despertamos un 2 de abril con la noticia de que se había emprendido una contienda armada para recuperar las islas Malvinas,
Un hecho histórico que abrió una herida profunda en todos los argentinos y marcó el principio del fin de una etapa.
En una mezcla de emociones, ante la situación que hoy vivimos y la imposibilidad de honrarlos como todos los años, invitamos a todos los vecinos así como, en 1982, acompañó a nuestros combatientes, en su lucha por la soberanía, a colgar una bandera en los frentes de nuestras casas y rendirles honor así a nuestros soldados y veteranos de Malvinas.
Este enfrentamiento generado dentro de un contexto de decisiones políticas erróneas e irresponsables, nos pone hoy, ya en democracia, ante el ineludible compromiso de una revisión histórica, reflexiva y crítica sobre los acontecimientos que dejaron un triste saldo: más de 600 vidas perdidas y otras tantas destrozadas de jóvenes que pelearon valientemente por nuestros derechos en aquel pedacito de territorio argentino.
Hoy, el reclamo sigue vigente, la herida sigue abierta y el recuerdo de aquellos jóvenes soldados que ofrendaron la vida por su Patria nos convoca a buscar la mejor manera de reclamar nuestros derechos y soberanía: a través del diálogo consensuado y sostenido por la convicción de que el único modo de lograrlo es a través de la paz.
Somos conscientes de que estamos en deuda por cada soldado de nuestra patria que derramó su sangre en ese territorio.
Pero nunca dejaremos de reclamar lo que nos pertenece, convencidos desde lo más íntimo de nuestro ser que las Islas Malvinas fueron, son y serán argentinas y así debemos transmitirlo a las nuevas generaciones.
Fuente: Prensa Municipalidad de Sierra Grande