Italia puede tener un pico de casos en enero

Roma – El aumento de casos de Covid-19 en Italia, que “puede llegar a los 2 millones de positivos”, podría provocar un colapso en los hospitales.

Lo afirmó el presidente de la Fundación Gimbe, Nino Cartabellotta, en declaraciones a Radio Cusano Campus.

Señaló que si bien a medida que se incrementan los contagios “no hay un aumento paralelo de las hospitalizaciones”, “con esta tasa de crecimiento de casos seguimos corriendo el riesgo de obstruir los hospitales porque puede llegar a los 2 millones de positivos”.

“Todas las medidas implementadas hasta ahora por el gobierno son una suma de paños calientes que son incapaces de frenar la circulación del virus”, sostuvo.

Agregó que se necesita un trabajo más inteligente para ayudar a frenar la circulación.

Cartabellotta afirmó que Italia tiene “una enorme cantidad de casos, nunca antes vistos”, a tal punto que “muchos han definido a Omicron como el virus más contagioso de la historia”.

El 2 de enero, se registraron en el país 61.137 contagios y 133 fallecidos, según lo detallado por las autoridades sanitarias.

A la fecha, Italia acumula un total de 6.328.076 infectados por coronavirus, 137.646 muertos y 5.119.893 pacientes recuperados.

“Las cifras que estamos viendo son claras en este sentido.

Tenemos un promedio de 100 mil casos por día”, dijo Cartabellotta.

Explicó que esto significa que “1.100 pacientes están hospitalizados en el área médica y 120 en cuidados intensivos.

Seguramente se debe al aumento de las dosis de refuerzo y también esperamos la menor virulencia de la variante Omicron”.

El experto señaló que si bien la congestión de los hospitales es “más lenta, el impacto está ahí y con esta tasa de crecimiento se corre el riesgo de llegar a 2 millones de positivos y aunque la tasa de hospitalización fuera del 1% habría 20 mil personas en el hospital”.

Por eso, subrayó, es necesario intentar bajar la circulación del virus. En primer lugar, “hay que limitar los contactos sociales, tal vez incrementando el trabajo inteligente (modalidad basada en la movilidad y flexibilidad horaria, trabajo por equipos y el uso de nuevas tecnologías, ndr)”.

El vicepresidente del grupo Italia Viva en la Cámara de Diputados, Marco Di Maio, dijo hoy que espera que el Green Pass (el pase de vacunación) reforzado “sea también necesario para el lugar de trabajo”.

“Restricciones y riesgos adicionales no deben pesar sobre quienes se vacunaron, sino sobre quienes de manera irresponsable continúan optando por no hacerlo. #Novaxout”., escribió en Twitter.

Cartabellotta dijo también que “la escuela representa un foco de contagios”.

“Está claro que no habiendo trabajado en los aspectos estructurales, podemos cambiar los métodos de cribado y cuarentena tanto como queramos, pero con esta circulación viral tan alta necesitamos hacer algunas evaluaciones. Si decidimos mantener abiertas las escuelas, habrá que cerrar algo más”, agregó, sobre el plan para reanudar las clases presenciales en enero, en el contexto del aumento de casos de Covid-19 de los últimos días.

En ese sentido, afirmó que se espera “un pico de contagios para enero” y que “viendo como sube la curva, no se pueden hacer previsiones concretas”.

En estas horas se inició un debate sobre la posibilidad de obligar a los 3.200 .000 niños no vacunados (es decir, alrededor del 90%) a quedarse en casa para seguir las lecciones, si dentro de sus clases hubiera más de un caso de Covid positivo. Los niños vacunados, unos 300 mil pequeños, se quedarían solos en el aula con los profesores.

Esto sería “una discriminación inaceptable, ya que la escuela debe ser el lugar de la inclusión”, escribió hoy en Facebook la exalcaldesa de Roma y miembro del M5S, Virginia Raggi.

Por su parte, Massimo Galli, experto en enfermedades infecciosas de la Universidad Estatal de Milán, dijo a Rai Tre, que seguramente, “por un día o dos habrá menos hisopados, y como consecuencia, menos contagios, porque en estos días de fiestas solo se hacen tests quienes tienen síntomas o los contactos directos con positivos, pero la situación cambia poco, porque la propagación es un dato de hecho”.

“Siendo realista, espero un crecimiento todavía por varios días y creo que esto debe imponer cierta prudencia”, advirtió.

Agregó que si bien hay una porción de la población que tuvo Covid-19, “Omicron parece perforar la inmunidad de los recuperados”.

“He visto a varias personas ya infectadas con el virus, que contrajeron la nueva variante, lo que sucedía muy raramente con otras cepas. Anteriormente, teníamos 2 o 3 casos de cada 1.000 de reinfección; con Omicron es más frecuente, incluso si el curado en general, muestra una respuesta compleja al contagio que aumenta aún más con la vacuna”, detalló.

El experto afirmó que se opone a la lectura generalizada de que “esta es una variante menos grave y que si muchos se infectan, esto tendrá el efecto de una vacuna, porque no es así”, ya que pueden reinfectarse.

Y luego está el problema, agregó, de que cuanto más sigue circulando el virus a esta velocidad, pueden surgir nuevas mutaciones.

“Esto no sé a dónde lleva. Si provoca un resfriado estaría bien, pero no estoy seguro. Basta pensar a en lo que pasó en Brasil, donde la gran difusión del año pasado llevó al surgimiento de una nueva variante”, concluyó.

Fuente: ANSA.