Trabajadores y trabajadoras del sistema científico se sumaron a las movilizaciones de este miércoles en rechazo al DNU del presidente Javier Milei, la desjerarquización del MINCYT y el CONICET y los recortes presupuestarios que anuncia el Gobierno. Investigadoras de distintas provincias cuentan por qué marcharon y cuáles son los reclamos más urgentes.
El sistema científico y la universidad pública se movilizaron en rechazo al DNU 70/2023 del presidente Javier Milei y a la desjerarquización del Ministerio de Ciencia y el CONICET, entre otras medidas que se han anunciado en estas primeras dos semanas de gobierno de la coalición “La Libertad Avanza”. Numerosos grupos de científicos, becarios y docentes se sumaron a la marcha convocada por la CGT, las dos CTA y organizaciones sociales, que se realizó este miércoles 27 de diciembre en distintas partes del país.
En la Ciudad de Buenos Aires, una manifestación masiva se congregó frente al Palacio de Tribunales y tuvo su pico alrededor de las 12 del mediodía. Atendiendo el protocolo antipiquetes dispuesto por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, el grueso de la concentración se mantuvo dentro de la Plaza Lavalle, aunque desbordaba sobre las calles aledañas por la gran cantidad de personas que se acercaron a manifestar su preocupación ante las implicancias que podría tener el DNU (que debe pasar por el Congreso Nacional pero entrará en vigencia mañana) para la clase trabajadora. Entre la multitud, podían verse banderas pertenecientes al sector científico y educativo, como las de ATE CONICET, IBYME-INGEBI, Jóvenes Científicxs Precarizadxs y la CONADU (Federación Nacional de Docentes Universitarios).
“Estamos acá en rechazo al DNU, que atenta contra los trabajadores, el empleo estatal y las organizaciones sindicales. Es un decreto y un Gobierno que tiene como premisa la privatización de todo, incluyendo la ciencia y la tecnología. En este sector, ocurren dos cosas. Por un lado, hay desarrollos que tiene que impulsar el Estado porque para los privados no son rentables y porque hay cuestiones que tienen que ver con la soberanía del país, como la industria satelital. Por otro lado, hay una política de vaciamiento y de reducción presupuestaria que implicará el desmantelamiento de áreas sensibles, como la energía nuclear y la producción pública de medicamentos”, le dijo a TSS la antropóloga Nuria Giniger, investigadora e integrante de ATE CONICET.
En Mendoza se estuvieron realizando asambleas y se sumaron a la movilización de este miércoles frente a los Tribunales Federales en esa ciudad.
Aparte del DNU, dentro del sector científico se sumó la preocupación por una minuta que circuló de forma no oficial sobre una reunión que hubo entre directores de CCTs (Centros Científicos Tecnológicos en los que se divide el CONICET) y los vicepresidentes del organismo, Claudia Capurro (quien ejerce la presidencia interina ante la falta de designación del nuevo titular) y Alberto Baruj. Allí se consignan algunos aspectos que pusieron en alerta a la comunidad científica, entre ellos, que el presupuesto 2024 será el mismo de este año y alcanzaría solo hasta el mes de junio; y que los resultados de concursos de becas, ingresos a carrera y promociones de categoría serán publicados pero “no serán efectivos hasta no contar con el presupuesto correspondiente”.
Más allá de la preocupación por los trascendidos, Giniger advirtió: “Hay que ser prudentes con la circulación de información porque todos y todas estamos muy angustiados. Habrá que salir a luchar por más presupuesto, de eso no cabe la menor duda, pero no quiere decir necesariamente que se van a caer las becas. Hay que estar atentos, en estado de alerta y movilización”.
En cuanto a las nuevas autoridades del sector, ya se publicó en el Boletín Oficial la designación del nuevo secretario de Innovación, Ciencia y Tecnología, Alejandro Cosentino; de la subsecretaria de Innovación, Maria José Martelo, (quien fue subsecretaria de Modernización durante el gobierno de Mauricio Macri); y del presidente del CONICET, Daniel Salamone. Todavía no se oficializó a la subsecretaria de Ciencia y Tecnología (que absorbería al ex MINCYT), que sería Paula Nahirñak (funcionaria de ese ministerio durante la gestión de Cambiemos).
En la Ciudad de Buenos Aires, una manifestación masiva se congregó frente al Palacio de Tribunales y tuvo su pico alrededor de las 12 del mediodía.
Las movilizaciones de este miércoles se realizaron en diversos puntos del país. La historiadora Marianela Scocco, investigadora del CONICET y docente de la Universidad Nacional de Rosario, dijo que en el CCT CONICET Rosario vienen realizando asambleas desde hace varios meses para discutir las problemáticas del sector y las implicancias de las propuestas electorales de los candidatos presidenciales. Este miércoles se sumaron a la marcha convocada por las centrales sindicales, que en Rosario se realizó desde la Bolsa de Comercio hasta la plaza San Martín.
“Participamos varios compañeros y compañeras, investigadores, becarios, personal de apoyo, para visibilizar nuestras demandas particulares pero también para acompañar las demandas de la clase trabajadora en general. Además, sacamos una resolución rechazando el DNU y los dichos trascendidos sobre el desfinanciamiento del CONICET. También rechazamos la desjerarquización del sector de Ciencia y Técnica que elimina el Ministerio y coloca al CONICET bajo la órbita de Jefatura de Gabinete; y la política de privatización y mercantilzación de la ciencia que se dio a conocer en algunas notas periodísticas brindadas por el futuro director del CONICET, Daniel Salamone”, contó Scocco.
Entre la multitud que se concentró en Tribunales, podían verse banderas pertenecientes al sector científico y educativo, como las de ATE CONICET, IBYME-INGEBI, Jóvenes Científicxs Precarizadxs y la CONADU.
En el CCT CONICET Mendoza también se autoconvocaron hace unos meses preocupados por los dichos del entonces candidato Javier Milei sobre su intención de privatizar el organismo. Así, conformaron el colectivo “Ciencia en la calle” y decidieron salir a los parques a mostrar en qué trabajan quienes hacen ciencia pública. Luego de las elecciones y ante la presentación del DNU, los investigadores continuaron realizando asambleas y se sumaron a la movilización de este miércoles frente a los Tribunales Federales de la Ciudad de Mendoza.
“Si contamos solo con el presupuesto de 2023 para el año que viene está claro que no va a ser suficiente para echar a andar la maquinaria científico-tecnológica que tenemos en el país”, dijo Paula Vogel, becaria doctoral del CONICET Mendoza e integrante del colectivo Ciencia en la Calle.
En Tucumán, la movilización se realizó a las 17 en la Plaza Independencia. Entre los asistentes, estuvieron el colectivo Ateneo Científicxs Tucumanxs (ACT) y docentes de la Universidad Nacional de Tucumán. “Fue una marcha muy tranquila, hubo movimientos sociales y gente independiente que se acercaba preocupada por el impacto de las medidas. Los científicos y científicas hemos marchado junto con docentes universitarios y trabajadores del Estado porque vemos que vamos a ser afectados por el DNU. Una de las cosas que se reclamaba era cuál es la urgencia de las medidas que se están tomando y del avasallamiento de las instituciones que se está haciendo”, explicó la bióloga Silvia Lomáscolo, investigadora del CONICET e integrante de ACT.
En Tucumán, la movilización se realizó a las 17 en la Plaza Independencia. Entre los asistentes, estuvieron el colectivo Ateneo Científicxs Tucumanxs (ACT) y docentes de la Universidad Nacional de Tucumán.
Mientras sucedían las movilizaciones de este miércoles, el presidente Javier Milei envió a la Cámara de Diputados el proyecto de ley “Bases y Puntos de Partida para La Libertad de los Argentinos», conocida como Ley Ómnibus, que busca implementar reformas estructurales en materia económica, financiera, previsional, de seguridad y defensa, entre otras áreas. “Nos preocupa que quedaría recortada la posibilidad de movilización, que es la herramienta democrática con la que contamos en este contexto para hacer llegar nuestros reclamos y pedir respuestas oficiales”, comentó Vogel.
Las investigadoras entrevistadas coinciden en que continuarán en estado de alerta, realizando asambleas y definiendo distintas líneas de acción, que se repiten en distintos lugares del país, como el abrazo al CONICET La Plata que se realizará este viernes 29 a las 11, en la Calle 8 entre 62 y 63. “Ahora nos estamos ocupando del DNU que oficializa despidos de trabajadores del Estado nacional que ingresaron en 2023 y que impacta en casi 200 personas dentro de CONICET. Les empezamos a pedir a los directores y directoras de CCTs que respalden a los trabajadores que entran dentro de la nómina. También solicitamos una reunión con el directorio y el gerente de Recursos Humanos”, señaló Giniger.
En tanto, Vogel afirmó: “Vamos a seguir convocando a asambleas con otros compañeros y compañeras con los que entendemos que tenemos que luchar codo a codo, de sectores como el educativo, el universitario y la APN (Administración Pública Nacional), para seguir organizando cómo vamos a hacer para defender tanto nuestros trabajos como el desarrollo de la ciencia pública en la Argentina”.
Por Nadia Luna
Fuente: Agencia TSS – Foto de portada: Nahuel Militano.