El Concejo Deliberante de Viedma declarará mañana deportista destacado de la Ciudad de Viedma a Nicolás Mario Mazzola, en reconocimiento a su destacada trayectoria como futbolista profesional.
La iniciativa corresponde a un proyecto presentado por los concejales Julián Algañaras y Lorena Alan, que destaca al futbolista por su valiosa carrera, que inició a sus 4 años en Sol de Mayo, donde debutó en primera división a sus cortos 13 años.
El futbolista migró con tan solo 15 años a Santa Fe para continuar su formación en Atlético Empalme e inmediatamente se fue a Independiente de Avellaneda donde fue goleador de inferiores y la reserva, debutando en primera división en el año 2008.
A la vez, representó a nuestro país en el 2007 en la Selección Sub-17 para disputar el Sudamericano en Ecuador, obteniendo el tercer puesto y siendo el goleador de Argentina y más tarde del Mundial Sub-17 de Corea del Sur 2007, llegando a cuartos de final.
Mazzola tuvo varios pasos por el exterior, jugando entre el año 2012 y 2014 en Suiza, para vestir la camiseta del Locarno, en 2018 en Chile, en 2020 en Grecia y en el 2024 a Guatemala.
Entre sus logros de su larga carrera destacaron:
En 2014 fue el goleador de la B Nacional jugando para Instituto de Córdoba.
Con Gimnasia y Esgrima de La Plata jugó 3 años con grandes logros como participar en competiciones internacionales.
En Unión de Santa Fe, fue donde tuvo una de sus mejores experiencias profesionales: allí marcó un hito histórico para el club: Convirtió el primer gol internacional de Unión disputando la Copa Sudamericana y le dio el triunfo en un histórico clásico con Colon.
En 2022 volvió a Instituto de Córdoba donde logró otra gran meta: el tan deseado ascenso del club a primera división después de 16 años.
En 2024 resignó ofertas de clubes de primera división para priorizar su proyecto familiar en nuestra Ciudad, volviendo a jugar en Sol de Mayo.
Los ediles destacan en su proyecto que “Hoy sigue vigente disputando el Federal A, sirviendo de inspiración a los chicos y chicas de nuestra Ciudad con los mismos anhelos que motorizaron a aquel chico de Viedma que decidió dejar todo para cumplir sus sueños y regresar para devolverle aquello que su Ciudad y su Club le dieron en su infancia. Porque, como dice la canción de La Renga, “el final es en donde partí”.
Fuente: Prensa Vamos con Todos