Brasilia – Varios estados brasileños solicitaron al gobierno del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, la compra “urgente” de vacunas chinas Coronavac para inmunizar a los niños contra el coronavirus ante la explosión de casos causados por la diseminación de la cepa Omicron.
El gobernador de Pernambuco, Paulo Cámara, solicitó al ministerio de Salud “la compra de las mencionadas vacunas (Coronavac) que ya están disponibles en el Instituto Butantan y las distribuya entre los estados como lo establece el Plan Nacional de Inmunización”.
“Tal medida debe ser tomada en carácter de absoluta urgencia”, apuntó Paulo Cámara en representación del foro que reúne a los gobernadores de la región nordeste, la segunda más poblada del país.
La exigencia de los gobernadores ocurre luego de que la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) aprobó este jueves por cinco votos a cero la aplicación en niños y adolescentes del fármaco Coronavac, fabricado con insumos importados de China en el Instituto Butantan del gobierno de San Pablo.
Con ello ya son dos las vacunas autorizadas para menores, puesto que el 16 de diciembre había sido dado el visto bueno al antídoto del laboratorio estadounidense Pfizer.
La aprobación de los fármacos disgustó al presidente, Jair Bolsonaro, contrario a la vacunación de menores, quien criticó en varias ocasiones a las autoridades de Anvisa.
Este viernes el secretario ejecutivo del Ministerio de Salud, Rodrigo Cruz, declaró que esa cartera va a “conversar con los estados para hacer una distribución justa (de vacunas) y avanzar en la inmunización de esa población (niños y adolescentes)”.
Sin embargo, el representante del Ministerio de Salud no precisó una fecha sobre cuando ocurrirá la compra ni el día en que se iniciará la distribución de la Coronavac.
Los contagios del Covid 19 se incrementan día tras día en Brasil donde el jueves hubo 168 mil nuevos contagios, y la media semanal fue de 110 por día, una cifra récord desde el inicio de la pandemia.
Estos números impactantes responden a la presencia de la variante Omicron, que representa más del 90 % de los nuevos casos, y su expansión puede agravarse cuando se inicie el ciclo lectivo de niños y adolescentes a partir de febrero.
La aparente falta de premura del gobierno de Bolsonaro en comprar las Coronavac puede estar relacionada con el recelo del gobernante hacia la vacunación y sus divergencias con el gobernador de San Pablo, Joao Doria, que es un defensor de la inmunización.
Doria ha calificado a Bolsonaro como “negacionista” y acusó al gobierno nacional de tomar medidas para “retrasar” el inicio de la inmunización de menores.
Para diferenciarse del gobierno federal Doria determinó la inmediata vacunación de 100 menores en la ciudad de San Pablo el jueves por la tarde, un par de horas después de que Anvisa autorizó el uso de Coronavac.
Este viernes el Instituto Butantan, del gobierno paulista, informó que está en negociaciones con las autoridades nacionales para la venta de 7 millones de dosis de Coronavac destinadas a niños y adolescentes, pero aún no recibió una respuesta definitiva.
Más allá de la decisión de Brasilia, las autoridades de San Pablo anunciaron que continuarán vacuandndo a niños y que disponen de un stock de 4 millones de unidades para uso interno de ese estado, el más populoso del país.
Fuente: ANSA.