Pole position para Carlos Sainz… ¡y para Van Beveren!

Dunas en abundancia. Eso es lo que vaticina el Empty Quarter, donde los competidores pasarán dos días en una etapa con un formato inédito, la etapa crono 48h. A lo largo de una especial de 547 km para los equipos FIA y de 625 km para los pilotos de la FIM, los participantes deberán detenerse a partir de las 16h en el siguiente de los siete vivacs del recorrido. En el Empty Quarter, nada es como en otros lugares, ya que la cantidad de arena blanda que hay que tragar bajo las ruedas tiene múltiples consecuencias, por ejemplo en el consumo de combustible, que hay que calcular… un factor importante que se le escapó a Pablo Quintanilla. Los pilotos más avanzados en el mapa de la etapa no serán necesariamente los ganadores de mañana. Hasta ahora las dunas han sido domadas en las mejores condiciones posibles por Adrien Van Beveren en moto y Carlos Sainz en coche. Aún les quedan por recorrer 112 y 149 kilómetros respectivamente para terminar la etapa como ganadores.

LO ESENCIAL

En la vida en las dunas, hay que tener en cuenta más cosas aparte de la travesía. Puede parecer obvio, pero es fundamental prestar atención a la mecánica y la labor empieza por un parámetro básico: gestionar el suministro de combustible. Pablo Quintanilla se ha quedado sin combustible diez kilómetros antes del primer punto de avituallamiento y ha pagado cara su negligencia. Tras recorrer unos 424 kilómetros se encuentra a más de 1h40′. Varios de sus compañeros de Honda, a los que ahora podrá servir como aguador (¡o repostador de gasolina!), han sido más sabios y eficaces y aún pueden aspirar a la victoria en Yanbu. Ricky Brabec es uno de ellos e incluso está virtualmente a la cabeza de la clasificación general con 2’48” de ventaja sobre Ross Branch. Es el mismo caso también de “Nacho” Cornejo y Adrien Van Beveren, el más rápido del día hasta el punto F, es decir, después de 537 kilómetros, donde esta noche duermen nada menos que diez corredores. La categoría de coches tampoco se ha librado de algún que otro revés y ha sido sobre todo la avaricia de Yazeed Al Rajhi lo que le ha hecho perder el liderato de la general despidiéndose quizás de la edición de 2024 en el kilómetro 51 (ver Un duro revés). Mucho más adelante en la especial, Stéphane Peterhansel sufrió el tipo de contratiempos mecánicos que forman parte amarga de las carreras de los más grandes campeones: un simple pinchazo detuvo su Audi en el kilómetro 256, pero la pérdida del sistema hidráulico le impidió hacer una reparación rápida y condenó su dirección asistida… En total, 2h08′ perdidas, ¡qué duro! A pesar de todo, el clan Audi ha salido airoso de esta primera parte de las 48h Crono, ya que Carlos Sainz se encuentra en una posición ideal antes de volver a salir a la carretera mañana por la mañana (véase La actuación del día) y Mattias Ekström ha marcado el segundo tiempo intermedio, lo que también le valdría el papel de subcampeón por detrás de su capitán de ruta, a unos 16 minutos. Por lo tanto, el clan RS Q e-Tron puede mantener la esperanza a pesar de los problemas de “Peter”. En cualquier caso, no deben dejar que un grano de arena sea un obstáculo para la bella mecánica que les acompaña. Máxime teniendo en cuenta que Nasser Al Attiyah y Sébastien Loeb, que hoy han quedado ligeramente rezagados, estarán al quite para mantener la presión.

En la categoría Challenger, Eryk Goczał ha aprovechado las dunas para aumentar su ventaja sobre Mitch Guthrie (a 56 minutos en la general virtual). Por su parte, en la categoría SSV, los Polaris de Florent Vayssade y Xavier de Soultrait han realizado una buena actuación, pero habrá que esperar a ver qué hace el amenazante João Ferreira mañana por la mañana en la segunda parte de la etapa en el momento en que llegue al punto C ( kilómetro 347). Por último, Martin Macík toma la delantera a Janus van Kasteren en camiones, una categoría en la que la mayoría de los favoritos también tienen 200 kilómetros que recorrer mañana.

UN DURO REVÉS

Tenía todos los alicientes de un piloto con temple antes de afrontar la gran etapa del Empty Quarter: terreno conocido y muy cerca de las dunas donde ya ganara el Abu Dhabi Desert Challenge el pasado mes de febrero; la condición de líder de la clasificación general adquirida con calma incluso en el terreno pedregoso; y una 4ª posición de salida bastante favorable para el gran reto de la contrarreloj de 48h. Pero no fue en las dunas donde Yazeed Al Rajhi cometió un error, sino entre los dos tramos separados de un gran chot donde quiso sacarle todo el jugo a la potencia de su Toyota Hilux. Precipitarse es una mala costumbre en el Dakar. Rodando a toda velocidad, la hierba de un camello o una simple deformación del terreno hicieron de pista de despegue para el coche, que volcó y quedó inmediatamente fuera de servicio. El saudí fue escoltado hasta la salida de la especial y no hay garantías de que pueda luchar por las etapas o ayudar a sus colegas de Overdrive a partir de la séptima etapa. El desvencijado vehículo tendrá que volver a cumplir todas las normas técnicas de seguridad después de la jornada de descanso.

LA ACTUACIÓN DEL DÍA

La apuesta parece haberle salido bien a Carlos Sainz, que ayer maniobró en la medida justa para salir en buena posición y cuajar una de las actuaciones a las que nos tiene acostumbrados en el Dakar. Al salir en 17ª posición, el español pudo demostrar la eficacia de un dominio del volante que se mantiene intacto desde sus tiempos de campeón del mundo de rallys y que se ha adaptado a las dunas gracias a sus casi veinte años de experiencia en el Dakar, concretamente desde 2006. Sainz, que ha ganado la carrera en tres ocasiones, ha sacado una ventaja de 4’31” a su compañero de equipo Mattias Ekström y de 5’19” a Sébastien Loeb, lo que le abre las puertas de su 43ª victoria de etapa en el Dakar y también la posibilidad de llegar a la jornada de descanso liderando la carrera.

REACCIONES

Stéphane Peterhansel: “No sé cómo vamos a salir de ésta”.

Interpelado en el km 256, donde se detuvo por un simple pinchazo, Stéphane Peterhansel tuvo que hacer frente a una serie de problemas técnicos.

“Hemos tenido un pinchazo, y el cuerpo del gato hidráulico ha fallado. Como no tenemos un gato manual, no sabemos cómo vamos a cambiar la rueda. Con el sistema hidráulico dañado, ya no tengo dirección asistida y no sé cómo vamos a salir de esta.”

Fuente: Prensa DAKAR